Y con esta receta ¡¡me despido de vosotros hasta finales de agosto deseándoos un magnífico verano!!
Ingredientes (2p):
- 300 gr de cazón*
- 3 ajos pequeños
- 1 cucharada de orégano
- 1 cucharada de pimentón dulce
- 2 hojas de laurel
- sal al gusto
- 50 gr de vinagre blanco
- 30 gr de aceite
- 30 gr de agua
- harina para freír pescado
- aceite para freir
* Si en la pescadería os preguntan que cómo lo queréis, decidle que va a ser en adobo y que si os lo pueden cortar en cuadraditos.
Preparación:
En un recipiente hondo (tipo bol) echamos todos los ingredientes excepto el pescado. Los ajos los ponemos enteros pero les damos un golpe con la hoja de un cuchillo grande. Removemos bien. Y ya por último ponemos el pescado cortado a trozos pequeños (de bocado).
Lo vamos a dejar en adobo mínimo 3 horas en la nevera cubierto con papel film. Lo ideal es hacerlo a primera hora de la mañana para comerlo al medio día. Hay gente que les gusta mucho la intensidad del sabor y lo dejan macerando toda la noche. Eso va en gustos. Debéis removerlo de vez en cuando para que todos los trozos se impregnen bien.
Importante: Debéis escurrir el pescado muy muy bien antes de freirlo.
1 hora antes de freirlo lo sacamos de su adobo y lo ponemos en un escurridor. Cuando haya pasado esa hora vamos secando los trozos en papel absorbente.
Pasamos los trocitos por harina y los echamos a freir. El aceite debe estar fuertecito, pero no humeante.
Consejo: No debéis freir mucho tiempo el pescado, tened en cuenta que son trozos muy pequeños. Así que yo no los tendría más de 1 minutos, dándole la vuelta a la mitad. Si los trozos son más grandes, tenedlos 2 minutos. Esto es muy importante para que nos quede un pescado jugosito.
Consejo: Cuando lo saquemos de la sartén, a mí me gusta ponerlos en un plato con papel de cocina absorbente, así quita el exceso de aceite. Y de ahí, los paso a la fuente o plato donde lo vayamos a presentar.
Espero que os guste.
¡¡Nos vemos a la vuelta!!